Divide en México el culto a la Santa Muerte a sus líderes y creyentes

In the Uno TV section for CBS, you'll find relevant news of the day from Latin America, including "Todo en Uno," a one minute wrap-up of the day's news from Mexico, and commentary of Nacho Lozano- a satirical look at the latest news and political developments from Mexico. Below you can find a feature piece produced by 'Historias de Uno.'

Este es el culto a la Santa Muerte, una veneración que va ganando fieles en nuestro país, sus devotos aseguran que esta imagen ha intercedido para alejarlos del mal, así lo comenta Fernanda una creyente a esta figura:

"Para no hacer las mismas tarugadas que hacía ¿qué tarugadas? Alguna vez se me ocurrió llegar borracha a la escuela".

Pero para muchos otros, esta santa, no es tan santa, más bien es motivo de división social y religiosa entre fieles, Enrique González, Sacristán de una iglesia católica opinó que "es gente que quiere buscar a Dios pero de una manera no consciente".

En el municipio de Tultitlán, Estado de México, sobresale una estatua de 22 metros de altura es visible desde la avenida López Portillo, su presencia, causa descontento en la zona, Carlos Morales el párroco de la iglesia católica más cercana asegura que solo vio "un monigote que está ahí, nada más y ya, es perder el tiempo, eso no existe".

Sin embargo Enriqueta Vargas la representante de este lugar llamado "Santa Muerte Internacional", defiende su culto y se ufana de ello, "estoy orgullosa de ser santa muertera, es una deidad a la cual respeto y adoro".

Pero el párroco insiste en que quienes veneran esta imagen, son ovejas descarriadas aunque confía en que algún día recapacitarán "regresarán en el momento que se abran a la luz y a la vida, no es necesario de ir a echarles un rollo", declara a Historias de Uno.

Sin embargo, este culto, no sólo divide a los vecinos de Tultitlán y municipios aledaños del Estado de México la Santa Muerte, tiene divididas a sus principales líderes, la de Tultitlán, Estado de México y la de Tepito.

Y precisamente en el barrio bravo, una de sus seguidoras la defiente: "Yo soy Enriqueta, ella se llama Enriqueta, pero de mente somos distintas"

La pugna, tiene que ver por la forma en la que se llevan a cabo los rituales, mientras que en Tepito sólo se le adora, en Tultitlán se realizan sacramentos.

"¿Usted hace lo mismo? ¡Quieres que me castigue Dios!, ¿no es válido eso? ¡No! ¡Para qué están las iglesias! Bautizos confirmación, casamientos es en donde está Dios, en una Iglesia, por los siglos de los siglos, no te puedes brincar algo tan sagrado", comenta Enriqueta Romero.

Sin embargo, ambas Enriquetas se valen de la Santa Muerte para obtener ganancias económicas en ambos sitios se vende de todo: veladoras, figuras, medallas, pulseras, libros, collares y lociones para realizar amarres, la otra líder Enriqueta Vargas comenta:

"Mucha gente ha de creer que aquí llegan fuertes donativos o que llega gente de la delincuencia o del narco, ¡ay no!, bueno fuera, pero no me llega ninguno, son católicos, creo".

Mientras que en las clases bajas sigue arraigándose esta creencia es evidente que la falta de una estructura y organización al interior de este culto, agudiza sus diferencias y éste escenario podría desembocar en una radicalización mayor.

Con uno Víctor Silva y Rodolfo Montes.